Las posibilidades de los cerramientos
Los sistemas de carpintería de aluminio se componen de perfiles, materiales soportados por ellos, y de diferentes accesorios que, en unión con los herrajes, son desarrollados para facilitar la fabricación e instalación de cerramientos que aporten amplias posibilidades constructivas.
La elección de un sistema u otro dependerá del nivel de calidad exigida, las dimensiones del cerramiento, la clase de envolvente que se precise, en cuanto a su mayor o menor integración con la estructura resistente, y el tipo de apertura requerida en el producto final.
Es imprescindible que el herraje a instalar en conjunto con los perfiles, sea el óptimo para el sistema de carpintería en cuestión; de este modo, el conjunto de perfiles más herrajes aportará al producto terminado las prestaciones propias de éste.
SISTEMAS
La combinación de distintos sistemas, junto a la multiplicidad de posibilidades estéticas, permite la realización de cerramientos “a la carta”, obteniendo la estética interior deseada, y la exterior unificada según las normas urbanísticas u ordenanzas particulares tanto de tipo estético como de exigencias técnicas.
En el conjunto de la fachada de un edificio, el punto débil en cuanto a la preservación de unas condiciones ambientales confortables, lo constituye el conjunto de paramentos, que separan el ambiente interior del exterior.
AISLAMIENTO
Para ello, las soluciones con rotura de puente térmico en cerramientos, aportan unos resultados de aislamiento al frío, al calor, al viento y al ruido excepcionales.
En el caso de los sistemas de carpintería en aluminio, ésta rotura se obtiene incluyendo un elemento no conductor, de rigidez similar a la del aluminio, que aísla los componentes externos de los internos en el cerramiento, rompiendo de esta forma el puente térmico, sin mermar las cualidades propias del mismo.
Las soluciones en rotura de puente térmico permiten el cumplimiento del código de edificación incluso en condiciones adversas.
Además, el bajo coeficiente de transmisión térmica de estos sistemas permite que los cerramientos sean elementos fundamentales en el ahorro de energía, hasta un 40% de la pérdida por la ventana, y por tanto en la reducción de emisiones de CO2.
PERDIDA TÉRMICA
También producen la discontinuidad en la transmisión de temperatura entre el interior y el exterior del habitáculo, evitando así la pérdida térmica, y un consumo excesivo de energía.
Con la rotura del puente térmico conseguimos elevar la temperatura superficial del perfil interior, minimizando el riesgo de aparición de rocío en la superficie o de condensaciones intersticiales en los vidrios.
De esta forma, los cerramientos de aluminio son cada vez más utilizados, debido a sus indiscutibles ventajas en términos de mantenimiento de la temperatura interior y cuidado del medio ambiente.